Circo Del Absurdo
Mi madre desde pequeña me advirtió:
que aires de motor no sólo traen gas,
que la duda tambié crea combustió.
Fuera de niña yo era caprichosa,
hay mucho por guizar en la hoya,
hay mucho que no se ve
en el abismo de la expresió.
Mi padre me hizo creer en la ilusió,
que con jugar nada se pierde,
si la esperanza no muere.
Y yo al salir de mi burbuja,
creyendo que el bien siempre triunfa,
creí en ello en extremo,
y aposté hasta la intuició.
Y de la realidad, déjame rabiar,
déjame gritar, aíº más, quejarme cuando menos
del circo del absurdo, es el circo del absurdo.
De la realidad, déjame rabiar,
déjame gritar, aíº más, quejarme cuando menos
del circo del absurdo, este circo del absurdo.
Entre conflictos de idioma y religió,
perdí otras cosas y a mi primer amor.
Y fui la víctima de mi depresió,
debajo de la sábana, de sol a sol,
y en tan extraño mundo viajé,
que un buen susto me despertó.
No miro hacia atrás, ¡Ay no sea!, no salga loco,
vivo entre la gente más feliz del mundo,
y todavía no se como es que a mi me cuesta tanto sonreir.
De no ser por el humor de mi gente,
estaría cada vez más demente,
hartada de dios dinero y sus quejas y ambició.
Y de la realidad, déjame rabiar,
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déjame gritar, aíº más, quejarme cuando menos
del circo del absurdo, es el circo del absurdo.
De la realidad, déjame rabiar,
déjame gritar, aíº más, quejarme cuando menos
del circo del absurdo, es el circo del absurdo.
¡Vaya! Los políticos,
marionetas, transicolor,
dando clases de actuació,
estupidez y corrupció.
La justicia corre bien,
siempre sirve al mejor postor.
Y sin dinero Don Dolor
no encuentra salvació.
La falta de educació,
el celular como adicció,
me paso en el tráfico
más tiempo que trabajando.
Soy buen consumidor,
si debo más de lo que gano.
¿Y tu? ¡Qué va!
No me digas que no andas igual,
a punto de reventar,
sin dormir, sin parar,
el estrés hace viajar.
Mundos inciertos,
que irá en la
locura que traigo
de la realidad.
Es el circo del absurdo,
este circo del absurdo.
De la realidad, déjame rabiar,
déjame gritar, aíº más, quejarme cuando menos
del circo del absurdo, es el circo del absurdo.