Nacidos Para Perder

Joaqu탭n Sabina
Soy del color de tu porvenir, me dijo el hombre del traje gris
No eres mi tipo le contesté, y aquella tarde aprendí­­ a correr
Al pisar la estació le abrí­­ la jaula a mi corazó
Tras las montañas estaba el mar, la noche, el vértigo, la ciudad
El mundo a cambio de una canció, me daba un plato, un beso, un colchó
La íºnica medalla que me ha dado la vida era de hojalata y detenció
No tení­­a salida el callejó de cuartel para el desertor del batalló
De los nacidos para perder, prima del alma desníºdate
Del traje gris de la multitud, devuélveme al camino del sur,
Al paí­­s de la niñez donde una y una sumaban tres
La íºnica medalla que me ha dado la vida en el escenario la gané
No tení­­a salida el callejó de cuartel para el desertor del batalló
De los nacidos para perder, de los nacidos para perder,
De los que viven muertos de sed, prima del alma desníºdame,
Y aquella tarde aprendí­­ a correr, donde una y una sumaban tres,
De los nacidos para perder, no eres mi tipo le contesté
Y aquella tarde aprendí­­ a correr