Y Sin Embargo . . .

Ana Belén
De sobra sabes
Que eres mi bandera
Que no miento si juro que darí­a
Por ti la vida entera, por ti la vida entera
Y sin embargo un rato cada dí­a
Ya ves
Te engañarí­a con cualquiera
Te cambiarí­a por cualquiera
Mitad arrepentid y encantada
De haberme conocido, lo confieso
Oveja descarriada
De tantas madrugadas
Sabes mejor que yo
Que hasta los huesos
Sólo calan los besos
Que no han dado
Los labios del pecado
Porque una casa sin ti es una embajada
El pasillo de un tren de madrugada
Un laberinto sin luz, ni vino tinto
Un velo de alquitrá en la mirada
Y me envenenan los besos que voy dando
Y sin embargo cuando duermo sin ti
Contigo sueño
Y con todos si duermes a mi lado
Y si te vas me voy por los tejados
Como gata sin dueño
Perdida en el pañuelo de amargura
Que empaña sin mancharla tu hermosura
No deberí­a contarlo y sin embargo
Cuando pido la llave de un hotel
Y a medianoche encargo
Un buen champá francés
Y cena con velitas para dos
Siempre es con otro amor nunca contigo
Bien sabes lo que digo
Porque una casa sin ti es una oficina
Un teléfono ardiendo en la cabina
Una palmera en el museo de cera
Un exódo de oscuras golondrinas
Y me envenenan los besos que voy dando
Y sin embargo cuando duermo sin ti
Contigo sueño
Y con todos si duermes a mi lado
Y si te vas, me voy por los tejados
Como gata sin dueño
Perdida en el pañuelo de amargura
Que empaña sin mancharla tu hermosura
Y cuando vuelves hay fiesta en la cocina
Y baile sin orquesta
Y ramos de rosas, con espinas
Pero dos no es igual que uno más uno
Y el lunes, al café del desayuno, vuelve la guerra frí­a
Y al cielo de tu boca el purgatorio
Y al dormitorio el pan de cada dí­a
Y me envenenan los besos que voy dando